...Y mi alma, se quedó contigo
La mirada se pierde infinita…Atravesando la bruma azul de las colinas a lo lejos;
Siluetas de tiempos sin tiempos.
El sol, acaricia tus formas…
Y como yo, posa toda su mirada en ti.
Los tiempos y el viento giran…
Canta invisible mi alma de errante en tus silencios;
presencia que llego sin ser llamada…
Beso tus fortalezas…
Me deslizo suavemente entre tu cima horizontal,
con la levedad de una pluma, recorro los filos de tu conciencia...
Soy cómplice de deseos, caprichos… y libertaria de amores.
Antes de partir; esperé el manto de la noche, me alcé a lo alto,
Te bajé una estrella y se la regalé a tus Sueños…
