Volver...

Volver a la Tierra de "nunca jamás".
Volver a las entrañas de mi ser, a la raíz de mi canto.
Volver al comienzo... a la nada,
al Todo.

Volver a la Tierra de "nunca jamás".
Caminar descalza...
Sentir... sentir... sentir...

Sentirlo todo; la brisa fresca en mi vestido,
mi pelo al viento... La Piel Feliz.
Volver, volver, volver, siempre volver.

Ese olor a manzanas maduras... a hojas húmedas,
a rocío de amanecer...
El cielo azul-celeste... de nubes blancas.

Me invade el verde, sus matices...
El Sol...
Me invade la Vida.
Y yo, solo quiero volver.

Me llaman las estrellas, más cerca que nunca,
las siento en mi mano...
Como cuando caminábamos juntos,
y no había más, que ese cielo de testigo...

Ahí, donde toda compañía es mágica.
Dónde no existe el tiempo... ni el pasado.
Dónde rehuyen los fantasmas y es Libre la memoria.
El Olvido, es almíbar dulce entre los labios...

Ahí quiero estar.
Ahí estaré. Porque es el centro de mi ser.

Trapecista.

"Saliste de entre en fondo de la noche... y te has vuelto trapecista sin red".

Y vuelo trapecista entre tanto sueño.
Te siento miedo de mi vuelo…
Te siento miedo del trapecio…
Te siento miedo de la altura.

Vuelo sobre ríos de aguas cristalinas, vuelo, vuelo...
Mi cuerpo danza con gracia de experticia en el arte…
Y tú, hombre de mascara azul, de sueños prestados,
de solidaridad fingida…
¿Porqué te asustas de mi vuelo?
¿Porqué ese afán de retenerme? …temes que no sea tuya?

Puedo amarte en libertad, si así lo quiero.
Puedo amarte en tu riqueza y tu pobreza…
Puedo amarte en tu verdad y en tu mentira…
Puedo ser tu eterna Compañera.

Pero no te amaré más de lo que lo hago,
si encierras mis ganas...
No te amaré más, si atas mis alas…
No me volveré tatuaje en tu memoria…
si no dejas libre, mis tiempos, mi amor y mi fuego.

Agradezco a un maestro.

Yo, siempre agradezco.

Agradecer a ti, que me pateaste en el suelo,
cuando me “derribaron”…
Cuando ya todo lo había perdido, me mataste la Fe…
A ti, que disparaste, aún viéndome desarmada…
con soledad protegida.

Agradezco cada una de tus puñaladas a traición.
Agradezco tus fantasmas, tus mentiras, tus trampas…
Agradezco tus manipulaciones,
Agradezco tus bajezas… todo, a ti te lo agradezco.

Porque ellas, gatillaron mis fortalezas.
Cada golpe recibido, fue un libro bien aprendido.
Cada ráfaga, obligó el blindaje de mi alma…
Las traiciones, reflejaron las noblezas.
Tus fantasmas derribaron a los “mitos”.
Las mentiras, develaron las verdades…
Me reí a carcajadas de las “trampas”…
Me hice un ajedrez con tus manipulaciones…
Hice “Jaque” a las bajezas.

Resucité la Fe, floreció la esperanza.
Me hice amiga, amante y compañera del Amor.

Enterré tu sombra en el pantano del olvido.
Me quedo con las luces...
Y te agradezco que hayas venido.

Solo Amor.

Como culparte?
De qué, de quererme...?
Culparte de qué?
Culparme, de qué?
De las luces… a pesar de las sombras?
De quererte, de amarte, de amarnos?
Porqué? Si el amor es Libre…

Y tú, con tu afán de ponerle rejas…
de ponerle “nombres” (…) para qué?
Si es, fue, y siempre será, solo Amor.

Palabras de nuestro tiempo...

"Mano con mano vamos juntos de una vez, para botar todos unidos la pared... el egoísmo impuesto que no deja ver que tu problema es mío, es nuestro y es de aquél".

Si fuera sólo a regresar a lo que fue...
y no tomara las lecciones del ayer,
refundaría lo que a fuego como ley,
arrebataron sin tomarme parecer...

Honestamente que borrar no puede ser,
antes la muerte a traicionarte a ti y aquél.
Que en el camino por tener lo que hoy podré,
diste la vida con inquebrantable fe.

Se trata entonces que podamos ejercer
la libertad de ser actor y proponer,
sobre el camino que queramos emprender,
para que el hombre libre pueda florecer.

Mientras un niño por la calle pida un diez,
y por escuela tenga el hambre y el neoprén...
la "libertad" seguirá siendo de papel,
sueño fecundo que no acaba de nacer...

Mano con mano vamos juntos de una vez,
para botar todos unidos la pared...
el egoísmo impuesto que no deja ver,
que tu problema es mío, es nuestro y es de aquél.

Ya no podemos esperar que alguna vez,
haga un "milagro" lo que debamos hacer;
tomar conciencia del derecho y del deber
para que el hombre libre pueda florecer.