Más allá del séptimo cielo...

Flota… flota… flota… 

La levitación de una pluma, es la peregrinación de las almas... 

Salta traviesa entre nubes, como si fueran de algodón... 

Cada saltito, se eleva un eslabón más, en la escala de la luz. 

Abajo: El Mar… las olas agitadas… el golpear de las rocas y su blanca espuma en las orillas. 

(…El Mar es el mundo) 

No quiere descender… solo desea el ascenso… 

El vaivén de la existencia, es como las olas del mar… todo lo que sube, tiene que bajar ...Y todo lo que baja, tiene que subir… Teme bajar. No desea experimentarlo más. Pero en el “descenso” recuerda que no hay porqué temer… Se dice así misma: Ya he estado ahí (muchas veces) con distintos vestidos… en ese mar, ya se como “surfear”. Levita… va y viene... en cada ida, retrasa el descenso… en cada ida, eleva más su vuelo... 

Y entre el tiempo elevado y sostenido, comprende el Existir… 

“Nada nos pertenece. Todo es ilusión. No existe la vida… no existe la muerte; solo el existir. Este mundo, lo que llamamos “realidad”, la vida misma… Son solo el “fragüe” para templar el alma... y la preparan para el final de los tiempos. Ahí, donde todos estamos citados... donde todos nos veremos las caras, de un lado u de otro, pero ahí estaremos... Del más grande al más pequeño... ahí estaremos. 

Toma nuevos bríos. Impulsa su vuelo, más allá de lo “permitido”... Frente ha sí, una gran puerta de madera de color café... se abre la puerta de su existir… Recorre campos verdes, sembrados de amor, luz y paz infinita… inhala... exhala... una y otra vez, y su interior se llena de ese aire... del más grande y cálido amor... Experimenta la felicidad más grande del universo entero! Ninguna conciencia ni corazón humano es capaz de imaginar tan solo la mitad de esa inmensa sensación... Ha vuelto a su hogar, por fin! Y no quiere volver a irse, nunca más... 

(Asechan las preguntas de todos los frentes....) 

Su alma llega herida… Hay llagas de guerra en toda su piel, y puñales que atraviesan con dolor hasta a su alma… El Amor infinito le abraza… le envuelve con su paz… y dice: Bienvenida. 

Las dudas… los reproches, salen a dar dura batalla. (Preguntas, hasta ahora sin respuestas...) 

¿Por qué el hambre? 

¿Por qué la guerra? 

¿Por qué el odio? 

¿Por qué el dolor? 

¿Por qué la mentira, el engaño, la traición…? 

La respuesta es categórica: 

"El Amor todo lo puede. Todo lo perdona, todo lo construye, todo lo salva. Después de la guerra… solo se construye la Paz, con Amor. Amor de la humanidad para la humanidad, con la humanidad y por humanidad. Solo con el amor se crea y se construye... sin él, nada es posible. Los seres humanos solo aprende a través del dolor... Y pueden demorar 80 años, (toda una existencia…) en aprender solo una Lección". 

Corren a su encuentro habidos niñitos (visten túnicas de color café) sus grandes ojos de niños iluminados, le miran con alegría y asombro!!! Están asombrados, porque nunca nadie había hecho este viaje desde ahí, hasta acá, y había vuelto para dar testimonio... Le miran, le buscan… y le llenan de curiosas preguntas!! 

Ellos estudian grandes libros, (las tapas de los libros son de color café) en ese instante recuerda que ella era una más de ellos, que estudiaba esos grandes libros y los cuidaban con gran esmero... 

 (Le manifiestan lo mucho que le quieren y todo lo que le han extrañado…) 

Preguntas, preguntas, preguntas, y más preguntas! 

¿Y dónde has estado? 

¿Qué has hecho? 

Ella responde: 

 “Uuuufff... vengo desde muuuuy lejos... He vivido en más de cinco mundos... Y vengo de Más allá de séptimo Cielo”. 

(Luego de unos instantes, debe partir) 

Debe partir... y no quiere hacerlo. Pide que le dejen quedarse... que ya vio suficiente... que solo desea quedarse en casa... El amor infinito le dice que no. No puede quedarse... no ahora. ¿Por qué no? Pregunta. “Porque aún no has terminado. No tenías porqué ni para qué hacerlo –pero lo hiciste- has sacado un libro para ti, sin autorización... y no hicimos nada para impedirlo... Porque fue tú decisión, y las decisiones traen consecuencias... y esas consecuencias deben ser asumidas con responsabilidad. Sin embargo -y depende de ti y de tu integridad- podremos hacer una excepción cuando termines ese libro. Aún falta... el gran desafío es mantenerte íntegra hasta el final... no importa cuán adverso sea todo, nunca debes olvidar quién eres en realidad y cuál es tu origen. Mantente fiel a este principio y podrás volver cuando sea el tiempo”. 

Siente que su pecho y su corazón se parten por la mitad! Un dolor de muerte indescriptible... y llora con desconsuelo. Quiere quedarse! No quiere descender más... no quiere volver (cualquier cosa, menos volver) pero debe obedecer... debe asumir su responsabilidad... aunque le duela el alma a morir. 

...Vuelve. Desciende lentamente... y entre más desciende... más siente la gravedad en su cuerpo... 

A comienzos, su cuerpo era una pequeña pluma blanca y hoy, termina en carne de hombre, que emerge del mar... para volver a dar testimonio una vez más de este ciclo que llaman vida... o quizás, ha dar fe de la “insoportable levedad del ser”.